Día 10/6/12

Me despido de los indúes del motel y su olor a curri en la recepción. Me he propuesto afeitarme una vez por semana, cada domingo. Contacto con la familia, internet permite una comunicación fluida y barata. Salgo tarde y las nubes cierran el cielo. Empiezo la ruta esperando a que en el momento más oportuno empiece a llover. Vestido de monstruo amarillo empieza a llover y cuando deja de llover.... Viento! Lo que más mal se lleva yendo en moto es el viento. La niebla te impide visibilidad, la lluvia también, sobretodo las nubes que levantan los camiones, pero el viento sobretodo si es racheado te desestabiliza. Te vuelve loco! Tanto es así que renuncio a seguir al mismo ritmo, bajo marcha y dejo pasar a los que me siguen. Prefiero ir solo, teniendo todo el carril para mí. La g640gs es bastante estable en esta situción. Arto de sufrir paro para hacer la foto de Michichi y miro mi situación en google maps en mi iPhone. Hay una ruta paralela que pone que es tradicional. Me decido a pasar por ella y salga el sol por Antequera! Al ver que todas las carreteras seguían el mismo patrón en ángulo recto decido coger una pista. Debo estar preparado para conducir en cualquier terreno. Al volver a la ruta principal veo unas curvas y unas montañas. Mi gozo en un pozo todo es recto aún. Se trata del residuo de tres minas de oro de la ciudad de Drumheler. Estoy muy cansado y renuncio a un hotel de 125 dólares canadienses por noche y el destino me pone en mi camino un bed and breakfast precioso. Su nombre old time. Y resulta ser la antigua residencia del dueño de las tres minas de oro a principios de 1900. Me encantan esas casas donde alquilan habitaciones y tienen un montón de detalles. Desde muebles centenarios a llaves de la luz pintadas con flores pasando por suelos de parket y bordados dándote la bienvenida. Después de una dura jornada he tenido un caramelito. Ademas he ganado una hora al dirigirme al oeste. Pido un Cafe, que me tomo entre recuerdos de la casa y de los actuales dueños y duermo como un tronco....